-Es una decisión muy difícil, pero impostergable: Ávila Lucero
Luego de que el Tesorero Municipal Jaime Francisco Tristán Flores reafirmara a los directores y coordinadores de los distintos departamentos del Ayuntamiento matehualense, que el ochenta por ciento de los ingresos que por concepto de participaciones del Ramo 28 se reciben, son utilizados para el pago de nómina, lo que ha provocado una muy difícil situación financiera, el edil camelense Héctor Fermín Ávila Lucero solicitó la colaboración de los asistentes para apoyar un recorte de personal que se realizará en acuerdo entre Directores, Oficialía Mayor y Contraloría.
Ávila Lucero dijo a quienes están al frente de las distintas direcciones y coordinaciones de la administración, que según las cifras y tendencias financieras del Ayuntamiento, aún con los ajustes que en distintos rubros se han efectuado, el pago excesivo por concepto de nómina está a punto de colapsar las finanzas municipales si no se toman medidas urgentes “es un asunto para mí y creo que para todos, sumamente difícil, pero impostergable por lo que los exhortó a hacer un análisis objetivo de el número de personas asignadas a su departamento, valorar su antigüedad, productividad etc. y trabajar con el recurso humano estrictamente necesario”.
En la reunión se dijo también por parte de los encargados de las finanzas municipales, que este programa de recorte estará sustentado en el reporte que los propios directores emitan y en base a un estudio minucioso realizado por personal de contraloría, para tener un indicador certero de los trabajadores que se tengan que despedir y en estricto apego a la normatividad existente en la materia.
Para concluir la reunión, el alcalde matehualense refrendó su confianza en el equipo de trabajo que lo acompaña en la actual administración, y recalcó su decisión indeclinable de no desviar recursos etiquetados para el pago de la nómina, “estamos a punto de presentar un acuerdo formal de medidas de austeridad, que será propuesto para publicar en el Periódico Oficial del Estado, y que nos dotará de un instrumento documental obligatorio, fundamental para llevar a cabo nuestra re ingeniería administrativa con la que esperamos salir avante de nuestras dificultades económicas”.